La cinta (Chlorophytum comosum Variegatum) es una de las plantas de interior de más fácil cultivo que hay. Es originaria de Sudáfrica, se trata de una especie herbácea perenne, sus hojas largas y lanceoladas, con veta central de color blanco y dispuestas en roseta desde la base. En primavera y verano lanzan estolones de las que surgen flores blancas, y los hijuelos.
El cultivo es sencillo, aunque se puede cultivar en el exterior hay que tener cuidado de que la temperatura no baje de los 0 grados centígrados (ya que la planta sufrira y se pondra fea).
Necesita muy buena luz, sino perderá la veta blanca-crema central, el sol directo muy fuerte quemara las hojas.
Es de rápido crecimiento, se trasplantará con frecuencia cuando veamos que las raices salen por los agujeros de drenaje de la maceta.
El riego cuando veamos que la tierra este seca, mas frecuente en verano, aunque la planta sea resistente a la sequía, no conviene forzar este periodo, ya que las hojas se pondran feas. en verano pulverizar las hojas para aumentar la humedad, y que no se pongan los bordes de las hojas marrones.
Multiplicación: Muy sencilla, a través de los hijuelos que salen de los estolones en primavera-verano.
Es una planta que con pocos cuidados, resulta muy vistosa.
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