La última planta en florecer en la ventana, ha sido uno de las dos plantitas de crisantemos que saque de esqueje en verano.
El crisantemo (Chrysanthemum morifolium) es de las flores más comunes en esta temporada por su llamativos colores y abundante floración, se adapta bien a cualquier terreno, y es muy fácil de cuidar. Requiere que el suelo drene bien, para evitar la pudrición de tallo y raíz, sol abundante, y protegerla del viento fuerte. Se irán cortando las flores, según se vayan marchitando para favorecer mayor floración.
Aunque muchas veces la planta se desecha tras su floración, se trata de una planta perenne, que puede durar bastante, si después de la floración cortamos los tallos desde la base, descansará un poco la planta, y volverá a brotar a finales de primavera, para florecer en otoño.
¿Y si no cortamos qué pasa? Jo, me da pena, pobre plantita... ¡Has cambiado la letra, Javiruli! Ayer compré crisantemos blancos, malvas y amarillos, pero estos no los había visto.
ResponderEliminarSi no la cortas, la planta empezará a formas semillas, perdiendo fuerza para el resto de flores. Como es una planta que se reproduce bien por esqueje, el producir semillas no es interesante salvo que quieras obtener nuevos colores.
ResponderEliminarEy enhorabuena por tus crisantemos, hay muchos colores, es una plana ue da mucho juego para hacer composiciones de color, y de flor cortada.